Vestidores pequeños para tu habitación
Queremos dedicar nuestro blog de hoy a hablarles sobre los vestidores pequeños en espacios reducidos. Se tiende a pensar que un vestidor es sinónimo de una gran habitación. Nada más lejos de la realidad, la tendencia actual es prácticamente lo contrario. Tengamos en cuenta que hoy en día las viviendas no suelen ser lo que se dice inmensas. Pero esto no debe significar el tener que privarnos de una magnífica zona dedicada en exclusiva a nuestra ropa y calzado.
El aprovechamiento de todos los recursos a nuestro alcance y jugar con el más mínimo detalle serán el eje conductor. Un vestidor único, aunque sea en menos metros cuadrados, es posible si damos uso de la imaginación. ¿Quieren algunos tips? Aquí los tienen.
Un vestidor libre de ropa en desuso
Cuando nos planteamos esta idea debemos ser conscientes de las limitaciones de espacio. Es por este motivo que recomendaremos deshacernos de todas aquellas prendas a las que no demos salida. Hay que tener en cuenta que nuestra meta es un lugar limpio, organizado y funcional. Y en muchas ocasiones menos es más.
Estudiar las posibilidades de la habitación
Lo más habitual a la hora de construir un vestidor es contar con una única habitación para este fin. Si no es nuestro caso, quizá es hora de imaginar el dormitorio de otro modo. Alturas, zonas en esquina normalmente desaprovechadas o incluso tras la propia cama. En este punto la originalidad y la mano de un buen profesional podrían sorprendernos.
O robarle dimensiones a un baño
Es otra de las propuestas. Valorar si nuestro cuarto de baño es lo suficientemente grande y si allí cabe esta opción. Un estupendo planteamiento es el de crear una transición entre el aseo y la propia habitación. Un lugar que aune ambas estancias a través del deseado vestidor.
Las alturas no se deben desperdiciar
Hoy en día existen infinidad de métodos que ayudan a sacar el mayor partido a los altos de nuestro hogar. Cuando los metros cuadrados son mínimos llegar hasta el techo es primordial. Los vestidores pequeños, pero que lleguen al techo puede ser la solución. Existen escaleras correderas, tiradores que nos ayudan a alcanzar las prendas o baldas que pueden desplazarse.
Digamos adiós a las puertas
Solemos imaginar un vestidor con sus puertas y cajoneras por doquier. Aunque si lo que necesitamos es aprovechar hasta el último centímetro podremos optar por el uso de cortinas. Funcionan a la perfección para separar ambientes sin preocuparnos de nada más. Otra de las alternativas serán las puertas correderas, aunque su montaje puede ser algo más complicado.
Espejos que dan profundidad
Hemos eliminado puertas, aprovechado alturas y ahora lo que precisamos es amplitud. Los espejos son ese elemento que engaña a la vista. Gracias a ellos una pequeña habitación puede convertirse en un lugar inmenso. Además, ¿qué vestidor que se precie no tiene un buen espejo en el que valorar el resultado?
Los elementos para una gran organización
El uso de cajas, baldas o colgadores para camisas es indispensable. Un vestidor bien organizado no depende nunca de su tamaño. Los componentes que nos pueden ayudar son infinitos. Además, a través de este sistema podremos sacar partido hasta la más mínima esquina.